Muchas veces el espejo da la imagen que uno cree que no puede alcanzar. Los reflejos de uno mismo como una exigencia impuesta por el medio que lo rodea, hacen imaginar la figura ideal prediseñada de los afiches publicitarios. El espejo es una herramienta más de las presiones sociales que logran resaltar las inseguridades propias comparadas con los modelos de bellezas, llevando a frustraciones y estos a trastornos alimenticios como LA ANOREXIA. Informar es uno de los medios de prevención.
Entrevista realizada al Medico Especializado en Nutrición Cantero, Jordán.
Es un trastorno de la conducta alimentaria, que se caracteriza por la negación de ingerir alimentos, presentando una notoria perdida de peso asociada con miedo a la gordura, al percibir distorsionadamente la propia imagen corporal.
¿Quienes son los más afectados a padecerla?
Afecta fundamentalmente a adolescentes (14 y 15 años) y adultos jóvenes. Las características indican que de cada cien consultas, noventa las realizan las mujeres.
¿Por qué se da la enfermedad?
Hay diversos predisponentes y precipitantes; existe en la sociedad, sobre todo en la occidental, un obsesión por mantener una imagen corporal en la que la delgadez se asocia a la belleza. Las mujeres pueden verse así mismos como “socialmente definidas”, en un alto grado, por como se ven. Los problemas familiares (separaciones de los padre), adicciones varias, también son factores que predisponen en la aparición de la enfermedad; el carácter y la personalidad, mujeres y hombres introvertidos, inseguros, perfeccionistas, obsesivos, etc., son otros factores.
¿En que estado llegan a su consultorio los pacientes con trastornos alimentarios (en este caso anorexia)?
Llegan a la consulta en estado crítico, siempre estos pacientes son difíciles de tratar, por lo tanto, ante un niño o niña con notable pérdida de peso, que realiza ejercicios físicos a diario, que se preocupa continuamente por la comida, que tiene una imagen distorsionada de su cuerpo, que se presenta inseguro, agotado, no se debe demorar la consulta con el médico especialista en adolescentes, quien conformará el diagnóstico y tratamiento adecuado.
¿Por qué llegan en tal estado a las consultas?
Por la desinformación, hace que los pacientes desconozcan la gravedad de esta enfermedad.
¿Asumen la enfermedad o se niegan a tratarse y a recibir ayuda?
En la mayoría de los casos, al inicio de la enfermedad, el paciente no reconoce ninguna alteración, niega su enfermedad, esto hace que no concurra a la consulta en la época temprana de este trastorno de alimentación.
¿Cuál es la mejor prevención para esta enfermedad?
Una mejor educación en el período de formación primaria y preadolescencia, para alertarlos sobre peligros de esta temible enfermedad. Tengamos en cuenta que existen estudios que el 40 % de niños entre 10 y 11 años están tratando de perder peso, generalmente por recomendación de sus padres. Otros factores serian sociales y culturales que consideran a personas físicamente deseables (inteligentes competentes, etc.) a los “flacos”, y físicamente indeseables (desalineados, deprimidos) a los gordos.
¿Cree usted que la televisión, propagandas promueven
De alguna manera la televisión, publicidades y medios gráficos crean un modelo ideal, un modelo a seguir, que causa insatisfacción con uno mismo en relación a esa imagen de “cuerpo ideal”.
¿Se debe considerar esta enfermedad como un mal de la exigencia social?
Las pautas sociales han determinado que ser delgado es sinónimo de éxito social. Vivimos inserto en una sociedad de mercado, que promueve ciertos valores e ideales estéticos, así como el mercado los individuos ofertan y demandan bienes y servicios, en una sociedad de mercado como la nuestra, las personas, igual que los objetos de consumo deben perpetuarse en un nivel de deseabilidad de ser consumidas para evitar ser desechadas y ser relegadas a una situación de tal marginalidad. De esta manera los individuos se deben producir como objetos vendibles, el cual se forma cada vez más exigente, competitivo y contradictorio.
¿Cuál sería el tratamiento más indicado para esta enfermedad?
El tratamiento debe ser interdisciplinario. El equipo de profesionales debe estar integrado, además del médico clínico especializado en adolescencia, por un psicólogo y un nutricionista. El médico se encargará de tomar las medidas terapéuticas para compensar al paciente, el nutricionista de reestablecer hábitos alimentarios normales y recuperar el peso adecuado y el psicólogo abordará los conflictos de paciente y su entorno (familiar, trabajo, etc.) que pudieron precipitar las alteraciones en la conducta alimentaria
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